martes, 26 de enero de 2010

Aniversario luctuoso del padre Martín Portela Robles

Reproduzco hoy lo que el profesor Eduardo W. Villa publicó en el boletín mensual del Círculo de Estudio y Acción Católica, Hacia el Ydeal, núm. 85.

Biografía Sintética del Rdo. D. Martín Portela Robles
1866-1946,

DECANO DE LA CURIA ECLESIÁSTICA SONORENSE.

Nació en Tesopaco, villorrio encajado en las estribaciones de la Sierra Madre, dentro del ex Distrito de Álamos, cuyo nombre oficial es Rosario, Estado de Sonora, México, el lunes 4 de junio de 1866, (sin que esta fecha esté comprobada con el documento respectivo).

Sus padres fueron don Martín Portela y Doña Josefa Robles.
Su padrino de bautismo fue el Presbítero Don Patricio Sánchez, Antiguo Promotor Fiscal y Consultor de la Diócesis de Sonora, quien demostró interés en el nuevo cristiano; solicitó y obtuvo de los padres del niño Martín, llevarlo a Magdalena, siendo él Cura de la Parroquia. Por los años de 1882 a 1885 cuando nuestro biografiado era un efebo, instruíalo en la santa religión católica; pero lo que es más, vino a descubrir su vocación al sacerdocio, admirando y elogiando las prendas personales de su hijo en el Señor, deseando vivamente que abrazara la carrera eclesiástica, según constancias escritas que he tenido a la vista cuando desde Magdalena sostenía correspondencia epistolar con el señor Don Martín, padre del llorado apóstol sonorense, recientemente fallecido.

El XII Obispo de Sonora Don Herculano López de la Mora, tomaba posesión de su extensa y bien pobre Diócesis en Octubre de 1887, el joven levita bajo la protección del expresado presbítero Don Patricio Sánchez, solicitó ingresar a la clase sacerdotal en escrito presentado en la fecha ante la autoridad eclesiástica correspondiente.

En aquel mismo año el jueves 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción, abría solemnemente sus puertas el Colegio Seminario donde estudió por espacio de ocho años con mucho éxito: recibió el grado académico de Bachiller en Filosofía el domingo 8 de octubre de 1893, llegó a ser un latinista notable y antes de su ordenación sacerdotal presentó brillante examen de Teología Moral bajo la presidencia del Vice-Rector del Colegio Seminario Don Manuel de J. Campoy Pbro. Esto fue el jueves 9 de julio de 1896 estado presentes gran número de personas de reconocida sapiencia.

Las órdenes sagradas que lo elevaron a Ministro del Altar las recibió el domingo 8 de diciembre (fiesta de la Inmaculada Concepción) de 1895 de subdiácono; el domingo siguiente, 15 del mismo mes y año, de Diácono y al año siguiente recibió el presbiterado en Durango, Dgo. De manos del Sr. Don Santiago Zubiría y Manzanera, Arzobispo de la Arquidiócesis el día domingo 27 de septiembre del año bisiesto de 1896.

Su Canta Misa fue el viernes 2 de Octubre de ese mismo 1896.
Fue profesor muy querido por alumnos internos y externos en el Colegio Seminario por muchos años.

Colaboró con numerosos artículos teológicos, de información, etc. etc. en el semanario, órgano de la Diócesis de Sonora “Antorcha Sonorense” fundado bajo los auspicios del Sr. López de la Mora, así como también años más tarde en “El Hogar Católico”.

Por los años de 1913 y 1914 el Padre Portela se había ya identificado tanto con la grey católica de nuestra ciudad que parecía parte integrante e imprescindible en ella. Su carácter apacible y tolerante lo hicieron apreciado de tirios y troyanos; pero no pudo tolerar un acto injurioso para la clase sacerdotal, que en enorme cartel, se exhibió contra los muros del Colegio Seminario en 1913, el cual decía “ANATEMA AL CLERO CORROMPIDO”. Entonces empuñó la pluma y en forma enérgica formuló una protesta, dándola a publicidad en el semanario, que era órgano oficial de esta Diócesis sufragánea, lo que originó su entrada a la Penitenciaría, la clausura de la imprenta y la supresión del aludido órgano periodístico “El Hogar Católico”.

Para honra de las personas que vieron la época, asentaré que diligentemente se formaron comisiones para gestionar su libertad, cosa que consiguieron con una premura que no esperaban.

El miércoles 12 de marzo de 1913 fue nombrado Vicario General de la Diócesis de Sonora en Sede Vacante por el Arzobispo de Durango Don Francisco Mendoza y Herrera, delicadísimo encargo dada la época en que lo desempeñó, cesando a la llegada del actual pastor episcopal, S S. Don Juan Navarrete, en 1919.

Desde aquellas fechas fue Cura del Sagrario con interrupción de dos destierros, siendo el último en 1934.

En 1941 se retiró a cuarteles de Invierno por sus enfermedades y su edad, pero gozando de su congrua hasta su llorada muerte acaecida el sábado 26 de Enero del año en curso (1946).

Estos datos han sido presentados con sencillez que fue característica del biografiado durante toda su vida, conocido y amado en todos los rincones de Sonora y a quien se le llamaba por antonomasia: EL PADRE PORTELA.


Hermosillo, Son., a viernes 28 de Febrero de 1946.

Eduardo W. Villa.